¿Qué quiero yo? Pues te quiero a ti. ¿Quién eres tú? Pues la felicidad.
Pues sí, porque no hay mejor en el mundo que la felicidad. Porque ahora mismo, lo único que necesitamos -y sobre todo yo- es la felicidad.
Y yo que creí que este año no podría ir peor que el anterior, eso creía. Pues bien, sí va peor. Solo es el principio, pero al parecer, en pocas semanas ya va peor que que todo el anterior.
No quiero hablar más de la cuenta, puede que todo cambie -ojalá-. Pero ahora ya no me queda mucho aire por respirar en el exterior, ni tengo brillo en mis ojos, y tampoco tengo esperanza.
Porque todo se va, todo se desvanece, y lo único que queda es hablar con la felicidad. A lo mejor así todo se arregla...
Y aunque me vean con una sonrisa, y siendo el mismo de siempre, no es verdad. Solamente hago caso al refrán 'al mal tiempo, buena cara'. Porque en estos momentos es lo único que tengo, una buena cara.