Donde hay herida, hubo pena.
Dulce pena, que de ser placer no me acordase escribir. No comería más felicidad que cebolla y me girase las pieles si desaparece la pesadumbre. Empezaría las partidas que no acabé por pretender olvidar la tristeza.
De mi llanto triste gano la guerra cada noche. De la melancolía nacen ideas y esperanzas, brotando la semilla del surrealismo y las palabras fatales. Solo hay que cambiar la perspectiva, hasta en los sueños.
Lanzo la moneda al aire; cara es herida y cruz es pena. Si sale beso huyo pero si sales tú muero.
De mi llanto triste gano la guerra cada noche. De la melancolía nacen ideas y esperanzas, brotando la semilla del surrealismo y las palabras fatales. Solo hay que cambiar la perspectiva, hasta en los sueños.
Lanzo la moneda al aire; cara es herida y cruz es pena. Si sale beso huyo pero si sales tú muero.
Donde hay herida, hubo pena...
Y qué bonito lo has contado…
ResponderEliminarLas heridas cicatrizan, pero la pena no se olvida… Se mitiga, en todo caso.
Un placer leerte, Antoni.
Un abrazo, y feliz tarde.
Me quedo con esa melancolía donde nacen ideas y esperanza......la tristeza es parte del acontecer diario y tiene la ventaja de dar mayor valor a la alegría cuando esta nos desborda.Saludos
ResponderEliminarUY! Pero que bonito, me ha gustado mucho tu manera de decirlo, te felicito.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cruel musa es la tristeza.
ResponderEliminarHola Antoni, apenaz he descuvierto tu blog.
ResponderEliminarTus letras se quedan adheridas en el alma.
ya te sigo.
Te hago una cordial invitacion a mi blog.
Te dejo el enlace por si te da por pasearte por alli.
https://www.passionwithoutregrets.com
Gracias.
Muy hermoso!
ResponderEliminar